Trabajar cada vez más, a cuyo tiempo se envejece, forma parte de la existencia del ser humano en el mundo moderno. Esta situación que suele confundirse con madurez, afecta sobretodo a los dos grandes polos apuestos de la sociedad: por un lado, padres y madres de familia, por el otro, solteros. En ambos casos con el paso del tiempo se pasa a vivir para trabajar con las consecuencias negativas que ello conlleva. En esta entrada no nos referimos al objetivo romántico de alcanzar la plenitud mediante un trabajo gratificante. Vamos a hablar de la realidad económica y laboral vigente y, vamos a plantear las claves para el empleo en un futuro inmediato:
Esta nueva propiedad genética del ser humano, cada vez se da más y a tiempo más temprano. ¡Y que no falte el trabajo! Encontramos a auténticos esclavos sociales que han llegado a esta situación por diferentes necesidades que podemos resumir en una sola palabra: consumo.
Principales hitos de consumo
Desde lo más insignificante: la necesidad de vestir correctamente, comer bien, marcar estilo, rodearse de instrumentos presuntamente necesarios para la vida e incluso gastos de socialización. Hasta lo más importante: fundar un hogar y cubrir la educación y manutención de los seres queridos.
Sea por A o por B, la persona entra en una espiral marcada por la necesidad de comprar para poder evolucionar.
La carrera del hámster
Hablamos de la carrera del hámster o la carrera de la rata cuando nos referimos a la situación de no avanzar, como un hámster en su rueda, por más que se corra siempre se está en el mismo sitio. Y esto es lo que hace la mayoría de personas:
Por la mañana salen a trabajar, todo el día están sometidos al impacto publicitario. Llega la tarde-noche y vuelven a casa. Tal vez compran aquello que ahora resulta imprescindible. Miran un rato la televisión, más publicidad, se acuestan (con suerte duermen más de 7 horas) hasta la mañana siguiente en que empiezan de nuevo el ciclo. Así, hasta la vejez, ganando dinero y gastando el dinero en consumar sus necesidades.
El endeudamiento como única forma de prosperar
Y esta situación se descontrola aún más cuando se generan deudas: un gran viaje, una gran ceremonia, un gran coche, una gran casa… todo lo grande lleva implícitos unos grandes costes económicos.
Para consumir es necesario dinero y el dinero se consigue trabajando. Cuando más trabajamos más grande es el sueldo, más dinero conseguimos y más podemos comprar. A la vez, cuando aumenta el sueldo, también aumentan la retención y los impuestos. Gastamos más porqué tenemos más necesidades, entre ellas las de mantener todo aquello resultante de nuestras inversiones y la necesidad de seguir comprando.
Trabajando eficazmente 8 horas al día, con el tiempo llegarás a ser jefe y a trabajar 12 horas al día.- Robert Frost
Tipos de empleos
Para conseguir dinero hay que trabajar y a día de hoy sólo existen tres formas de empleo:
Funcionario
Como no es tu caso, vamos a pasar por alto este perfil.
Asalariado
El asalariado trabaja en una empresa que no es de su propiedad, por lo tanto depende de las decisiones de sus jefes y de los cambios de legislación. Cualquier decisión externa puede influir en su estabilidad laboral y financiera. La empresa en la que trabaja puede cerrar o las leyes que amparan esta empresa pueden cambiar obligándole a trabajar más horas, en peores condiciones, por menos dinero o forzándole a separarse de familia y amigos -deslocalización.
Alcanzar la seguridad mediante un trabajo fijo forma parte del pasado. El trabajo fijo se ha extinguido. El empleador siempre va a encontrar alguien que produzca más rápido y más barato. El asalariado está condenado a trabajar cada vez más para ganar lo mismo.
Autoempleado
El autoempleado es el dueño de su propia empresa. Tanto si es profesional, emprendedor o franquiciado, tanto si trabaja de forma independiente, como si dirige un equipo humano, tanto si dispone de libertad de movimiento o está sentenciado a seguir unas pautas… En todas las situaciones no basta con poner todo su ingenio, su esfuerzo y su capital para mantener el negocio, también esta sometido al yugo de la legislación y la burocracia.
Lo bueno del autoempleado es que dispone de todo el tiempo del mundo para organizar su vida… lo malo es que acaba usando este tiempo para trabajar.
La gran estafa
El mercado laboral ha cambiado después de los primeros años de crisis. La explotación laboral está generalizada y consentida en España. Diariamente nos encontramos con ofertas denigrantes que se aprovechan de esta precariedad laboral, las ofertas existen porqué también existe la demanda. Cada vez hay más personas trabajando más horas por menos dinero y en peores condiciones. El valor humano queda relegado a un segundo plano, al igual que los objetos de consumo, lo importante es el aquí y ahora, usar y tirar.
Insistimos en que este concepto de usar y tirar no sólo está acabando con los valores éticos, también acabará con el mundo tal y como lo conocemos.
Crisis y globalización. Las cosas no volverán a ser como eran antes.
La era de Internet. No es oro todo lo que reluce
Muchas veces la solución llega con un cambio drástico de trabajo o de enfoque en el caso de los desempleados.
Desde hace unos años se nos está vendiendo el sector de las nuevas tecnologías e Internet como la solución a los problemas actuales de empleo. Si bien constituyen la herramienta del futuro y a día de hoy es necesario tener un mínimo de conocimiento del entorno digital, tenemos que tener muy claro que el uso de la herramienta en sí no es la solución a los problemas financieros ni de ocupación.
Son muchos los trabajos que derivan de la era digital y muchas las oportunidades de negocio. Pero, como en todos los proyectos, sin una planificación previa nos arriesgamos a formar parte de una burbuja y desaparecer tras su estallido.
Poca inversión y poco esfuerzo es igual a escasos beneficios
Una tienda online en el ámbito del dropship (sin almacén de productos) parece muy atractiva ya que no requiere apenas inversión, pero puede desencadenar en la situación que tras un gran esfuerzo no se obtiene el mínimo de beneficios para seguir existiendo.
Lo mismo pasa si nos decantamos por un trabajo creativo en el que se generan artículos para venta en stock. Puede que después de cinco meses de producción, con la venta de estos artículos no tenemos ni para pagar al proveedor de Internet.
Y lo más triste de todo… La única forma de trabajar en el marco de la ley y a la vez cotizar un poco para la jubilación es estando constituido como autónomo. Y el autónomo sí es la Gallinita de los Huevos de Oro… pero para el Estado. El autónomo es el perfil de trabajador que más aporta y menos obtiene a cambio. Pasada la época en que se goza de bonificación, la mayoría de autónomos no ganan ni para pagar su propia cotización.
(Existen alternativas al autónomo que son las Cooperativas y las Empresas de Facturación. Pronto hablaremos de los pros y los contras).
Los efectos de trabajar en exceso
Después de ocho horas ininterrumpidas dedicadas a una actividad, hay una perdida de concentración y se pierde en rendimiento. Esta situación repetida en exceso trae consigo el desánimo, la tristeza, la irritación, el mal humor, la angustia, el sentimiento de culpa por no alcanzar las metas pactadas y la depresión.
A priori es mejor trabajar menos y ahorrar más para cuando sea necesario gastar un dinero extra. También es una buena opción reducir los gastos y crear activos (de esto hablaremos pronto en nuestro blog).
La clave del empleo del futuro y la única solución para sobrevivir a la globalización
¿Porqué la mayoría de ricos (pero los de verdad, los que nacen ricos), viven como ricos siempre y los pobres, son siempre pobres? Porque la prosperidad económica sólo se consigue fuera del propio trabajo. Sólo cuando no se necesita el dinero de manera apremiante es cuando se consigue crear riqueza.
Vamos camino a una economía de servicios, el gran valor lo aportará el talento, la innovación y el conocimiento.
Trabajar y ser feliz sólo es posible cuando se consigue un trabajo que te permite reafirmarte como persona en el proceso de perseguir las metas, y no sólo en el hecho de conseguir estas metas.
Una máquina puede hacer el trabajo de 50 hombres corrientes, pero no existe ninguna máquina que pueda hacer el trabajo de un hombre extraordinario.- Elbert Hubbard